México elimina la libertad de decisión y aprueba ley para obligar a los padres a vacunar a sus hijos

La reforma aprobada también prevé que los centros educativos apliquen en los centros escolares aquellas dosis contenidas en el Programa de Vacunación Universal a niños, niñas y adolescentes.

Está ley busca dar un golpe a los movimientos y personas que cuestionan las vacunas como una forma eficaz de inmunización por los diversos efectos negativos y posible peligrosidad. México siguiendo los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) quien catalogo a esta libertad de cuestionar como  una de las 10 amenazas para la salud mundial hace casi dos años, como muchos países ha tomado medidas para subir las tasas de vacunación mediante la imposición y sanciones a quienes no obedezcan. 

Con un total de 103 votos a favor, tres abstenciones y ningún voto en contra, se avalaron las reformas a 11 artículos de tres leyes: la Ley General de Salud, la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, y la Ley General de Educación.

Este dictamen de ley fue propuesto por el senador Ricardo Monreal para que los menores de edad reciban vacunación de forma obligatoria y así tratar de prevenir que vuelvan a surgir brotes de enfermedades en el país, como según sucedió en 2018 con el regreso del sarampión a México.


Con esta votación, se modificaría y añadiría el artículo 157 Bis 1 de la Ley General de Salud, para que precise que "toda persona residente en el territorio nacional tiene la obligación de aplicarse las vacunas contenidas en el Programa de Vacunación Universal, de conformidad con esta Ley, independientemente del régimen de seguridad o protección social al que pertenezca".

En caso de no cumplir con esta ley, que ahora hace que las vacunas sean también un requisito para el ingreso a las instituciones escolares, las autoridades podrán tomar acciones a través de la procuraduría de protección de niñas, niños y adolescentes.

La refoma ahora pasará a la Cámara de Diputados para su revisión, discusión y posible aprobación. De resultar en esto último, quienes ejerzan la patria potestad, tutela o guarda, estarán obligados a asegurarse que los menores de edad reciban las vacunas obligatorias, exceptuando aquellos que cuenten con una justificación médica..

Las personas que ejerzan la patria potestad, tutela, guarda o, en términos generales, sean responsables de personas menores de edad o incapaces estarán obligadas a que estas reciban las vacunas referidas

Además, la reforma precisa que “el incumplimiento deliberado o sin que medie justificación médica certificada para contravenir dicha obligación dará lugar a acciones de la procuraduría de protección de niñas, niños y adolescentes correspondiente, dirigidas a efectivizar la vacunación”.

Estas acciones, detalla el dictamen aprobado, irán desde la notificación hasta su aplicación obligatoria, en términos del protocolo que para tal efecto emita la Secretaría de Salud (SSA), en coordinación con la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes.

Si el tutor no cuenta con la cartilla, las autoridades escolares deberán canalizarlos a la institución de salud correspondiente para que se expida dicho documento o se apliquen las vacunas que le falten al menor. En caso de que el tutor se niegue las autoridades escolares deberán solicitar la intervención de la procuraduría de protección de niñas, niños y adolescentes.

“No es cualquier cosa esta reforma. Es trascendente, no es para llenar la agenda. Se trata de un tema fundamental”, aseveró el gobernador de Zacatecas.

¿Las vacunas deben ser recomendadas u obligatorias?

La comunidad médica nacional en el 2016 ha coincidido en que las vacunas deben ser un bien recomendable pero no obligatorio, ya que una posición autoritaria respecto a ellas podría aumentar el rechazo que ya les tiene una parte de la sociedad.


Ésta ha sido una de las conclusiones del III Congreso Nacional de Deontología Médica realizado en el 2016, que se ha celebrado en Alicante y en el que han participado casi una treintena de doctores expertos en distintas materias bajo el enfoque de la ética sanitaria.

Una parte del cónclave se ha centrado en "cuestiones deontológicas en torno a las vacunas", donde el doctor en medicina familiar y presidente de la plataforma NoGracias, Abel Novoa, ha considerado "inmoral e injusto atacar a los padres que deciden no vacunar".

"El riesgo individual para los niños que no son vacunados es muy pequeño; un padre que no vacuna a sus hijos no es un homicida, como se les acusa muchas veces, no está justificado", ha defendido en declaraciones Novoa a EFE.

Su postura no pretende ser la de una persona antivacunas, sino al contrario, asegura, pues explica que ha apostado por que la comunidad médica trabaje en convencer y seducir a esos padres y madres que tienen dudas sobre estos tratamientos preventivos.

Novoa ha explicado que parte de esta nueva polémica surge por el cambio de contexto que ha sufrido la ciencia médica, que ha pasado de tener "pocas fuentes de conocimiento que le contradijeran y ser autoridades muy respetadas", a vivir en una sociedad de la información.

"Es inevitable que existan dudas", por lo que es prioritario que "los médicos se muevan y participen en debates de manera respetuosa, para mantener la credibilidad y la confianza, teniendo un papel facilitador", ha opinado.

Insiste en que "las vacunas son necesarias", pero "ser crítico no es ser antivacunas", y lo que no se puede hacer en ningún caso es "santificarlas como un tótem sagrado".

Los médicos "debemos que tener otra posición, comprensiva con los que tienen dudas; ser muy transparente y estar dispuestos a rectificar, a reconocer que hay cosas que no están claras", ha indicado.

La iniciativa dada por México como en otros países como Alemania y Australia quita autoridad y libertad de decisión a los padres de familia pues también establece que en los centros escolares se aplique de forma obligatoria aquellas dosis contenidas en el Programa de Vacunación Universal.

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Referencias: 

Infobae, EFE

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1 Comentarios

  1. Me parece que seguir la agenda genocida de OMS (Organización Mundial de la Enfermedad) es un crimen contra a población desinformada de todos los daños y efectos secundarios que generan las vacunas, las cuales nunca han podido probar su eficacia ya que no existe ni un solo estudio que así lo confirme.
    La farmafia es genocida y su útimo que le importa es la salud de la gente. Inyectan neurotoxicos, enferman a la población y ganan dinero.
    Que horror!!!
    En que mundo vivimos.

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